lunes, 18 de enero de 2010

EL EJÉRCITO, ENEMIGO DEL PUEBLO.

Escuchamos que nuestro “glorioso” ejército nacional esta haciendo trabajo social o que esta combatiendo el narcotráfico, pero su tarea realmente es la de salvaguardar el orden establecido por una clase social: la burguesía.

Por eso hoy quiero tratar ese punto ¿Cuál es el origen del ejercito nacional en nuestro país?... A partir de 1917 y después del levantamiento armado conocido como la Revolución Mexicana este trajo como consecuencia que los que llegaron al poder político impusieron su nuevo orden social, una vez derrocada la dictadura de Porfirio Díaz, siguieron en el poder personas que de alguna manera mantuvieron una buena relación con el dictador y con Madero. Se impuso la burguesía. Perdieron la revolución mexicana los campesinos, los obreros y el pueblo en general. Quedo claro que el pueblo mexicano levantado en armas con el ejercito de Francisco Villa, con Emiliano Zapata y con otros lideres populares, fueron los que perdieron. La entrega de tierras, el acabose de los latifundios, justicia y democracia social; todas esas demandas quedaron en los discursos del PRI-Gobierno y hasta la actualidad seguimos escuchando lo mismo en las campañas electorales.

Es entonces que la burguesía toma el poder de manera engañosa, impone sus propia dictadura como clase social, se constituye un ejercito nacional con individuos enfermos de poder político y económico. A los militares se les compensaba con puestos en el gobierno y se les premiaba su lealtad al Presidente de la Republica. Los jefes militares mas representativos que servían a esta clase social y que se fortalecieron no solo políticamente sino también en lo económico, fueron varios, entre ellos podemos nombrar a Carranza, Obregón, Lázaro Cárdenas, etc. Estos militares que protegieron el nuevo orden impuesto, eran populares, de lucha, pero el poder los corrompió y estuvieron siempre al servicio de dos tipos de intereses: el de la burguesía del país y de los designios de los Estados Unidos. Eso de que Cárdenas era socialista, solo fue llamarada de petate, una tomada de pelo.

Por lo tanto las fuerzas armadas del país y el ejército siempre han servido a la clase social dominante, a la burguesía, que sin conciencia revolucionaria y sin vocación de servir al pueblo, tal es así que en distintas épocas de la historia moderna este “glorioso” ejército ha sido utilizado para que reprima a los movimientos sociales y populares. En el tiempo de los gobiernos del PRI se utilizo al ejercito para desbaratar movimientos de huelga, ejemplo claro fue la represión y detención de los lideres ferrocarrileros de 1958. el movimiento social y popular encabezado por los estudiantes en 1968 en Tlatelolco.

Los presidentes de la Republica se han sostenido gracias al apoyo de las fuerzas militares. Carlos Salinas llega al poder con toda la fuerza de los militares, caso muy espectacular el de golpear y detener a los lideres petroleros.

El ejército ha sido utilizado para crear estructuras paramilitares que sirven a la vez para intimidar, desaparecer, reprimir y matar no solo a los movimientos sociales, también a la población inerme. Los sucesos más recientes: el 28 de junio de 1997 en Aguas Blancas, Guerrero y lo acontecido en el 2004 en Acteal, Chiapas. En el norte de Veracruz desde 1999 el ejercito se acampo en la sierra, llevando atrocidades en contra de los pobladores (el 16 de septiembre de 1999 miembros del ejercito matan a un joven de 17 años y lesionan al comisariado ejidal de Xococapa)

El ejército hoy sale a las calles con el pretexto de combatir a las organizaciones criminales de narcotraficantes. Pero con la pretensión de lograr ese objetivo pisotea los derechos humanos de los ciudadanos, invade predios y roba frutos de los lugareños, abusa sexualmente de mujeres indefensas, etc. El caso mas sonado fue el de la indígena Ernestina

Ascencio en Soledad Atzompan en la Sierra de Zongolica, Veracruz. Además de distintos casos en Guerrero, Morelos y otros Estados del país, en donde las brutalidades cometidas a nombre de este “glorioso” ejercito, nos dicen que esta institución nunca ha estado al servicio del pueblo, mas bien en contra del pueblo mexicano. La sangrienta brutalidad con la que el ejercito somete, viola y asesina a comunidades empobrecidas, marginadas y aisladas son parte de la violencia institucional que el Estado burgués implementa violando constantemente los derechos humanos en el país, pero también es la coartada perfecta para contener la expresiones sobre todo las de inconformidad social. Hace unos días el espurio Felipe Calderón Hinojosa, jefe de las fuerzas armadas y del ejercito no se conmovió, ni siquiera protesto por la muerte de una familia completa en manos de los criminales del ejercito, esto supuestamente por una equivocación de los militares, todo por el bendito pretexto del combate en contra del narcotráfico. ¿Acaso vamos a seguir esperando más muertes inocentes todo por disposiciones de malos gobernantes?

Hoy el Gobierno federal tiene entre sus iniciativas legales un paquete antiterrorista que criminaliza la protesta social, así también se prepara el decreto de la Secretaria de Defensa Nacional para crear un cuerpo especial de fuerzas de apoyo al ejercito, este grupo de elite ajeno a las funciones constitucionales del ejercito, bien podría ser el artefacto contra los movimientos sociales de inconformidad. Esto es parte de un modelo de un Estado Contrainsurgente y autoritario que hoy tienen el respaldo de los poderes facticos, del imperialismo norteamericano y del capital internacional.

La violencia se ha desatado por parte del estado Burgués, los líderes sociales pueden ser acusados de narcotraficantes o de pertenecer a alguna organización subversiva. La dignidad de las mujeres pobres e indígenas es pisoteada. Estamos en un Estado que vulnera los derechos más elementales del pueblo mexicano. Ya no nos extraña que los dignatarios mas altos del Clero reaccionario pidan la presencia del ejército, que los empresarios pidan que entre el ejército a las ciudades, que las empresas televisoras, los partidos políticos y los gobiernos locales pidan la presencia del ejército en la zona urbana y rural del país. ¡No nos extraña porque ellos son parte de este estado de cosas que conviene a sus intereses, a los intereses de la clase burguesa que hoy por hoy detentan el poder político y económico!

Quiero concluir con lo siguiente: Primero: Ya quedo claro que con el triunfo del PAN, las cosas no cambian. Porque el sistema capitalista se afianza y recrudece las diferencias sociales entre ricos y pobres. Segundo: El ejercito esta al servicio de la clase burguesa, explotadora y parasitaria de este país. Y tercero: la guerra en contra del narcotráfico es muestra de estado de descomposición del Estado Capitalista, el crecimiento y fortalecimiento de las bandas criminales son resultado de la corrupción del sistema capitalista.

Es necesario agrupar al pueblo en organizaciones independientes de los Partidos Políticos y del gobierno... politizar y luchar por un Sistema Social más Justo y Democrático...Una real transformación de la sociedad en donde la burguesía y su ejército ya no gobiernen, en donde gobierne la clase social que es el proletariado y su nuevo ejercito revolucionario.

PROFR. VLADIMIR GODOY

vladimirgodoy@hotmail.com

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